Las grandes producciones cinematográficas, por lo general, cuestan un dineral, una inversión de tiempo tremenda y una organización demencial. A pesar de eso (y como podréis ver a continuación), no se libran de contener algunos fallos que muchos podríamos catalogar de ‘estúpidos’. Y es que por grande y costosa que sea una producción, lo más probable es que no se libre de contener algún que otro gazapo.
Y es que esto es algo que pasa con películas que han llegado a optar al Oscar o que, incluso, se lo han llevado. Y precisamente en esto nos centraremos hoy: en pequeños fallos de películas muy reconocidas por el público y la crítica, de aquellas que se consideran ‘obras maestras’.
En Tierra Hostil
William James (Jeremy Renner), el sargento protagonista de la película, camina entre unas puertas/cortinas de plástico cuando, de repente, podemos ver claramente una mano que sostiene parte del decorado. Suponemos que era una forma de facilitarle el paso al actor, pero no deja de ser curioso que nadie se haya percatado de que la mano se veía de una forma bastante descarada.
Gladiator
La oscarizada película protagonizada por Russel Crowe tiene unos cuantos gazapos… y hoy comentaremos uno de los más ‘descarados’. Hablamos del momento en el que el gladiador Tigris cae de espaldas derrotado al suelo. En ese preciso momento podemos ver su rostro, malherido… pero es que por corte, en la escena siguiente, su cara ya no está descubierta, sino tapada por una máscara metálica manchada de sangre. ¿Cómo ha desaparecido y aparecido este complemento? Solo la magia del cine lo sabe.
El Padrino
Sonny Corleone (James Caan) muere tiroteado en la escena más sangrienta de la película. Cuando empiezan a dispararle, la luna delantera de su coche se hace añicos con las balas y él acaba cayendo sin vida a un lado del vehículo… y hasta ahí todo bien. Pero claro, cuando llega la policía, de forma milagrosa, la luna del coche está completamente reconstruida e impecable. Pero a Coppola se lo perdonamos.
El Retorno del Rey
Tenemos que ir hasta la escena en la que Gollum acusa a Sam de haberse comido el pan de lembas. En la primera escena no vemos ningún rastro del pan en la ropa de Sam mientras que, en la segunda, en un cambio de plano, vemos que, ahora sí, hay unas cuantas migas en la solapa de la chaqueta del hobbit evidenciado su ‘crimen’.
El Silencio de los Corderos
Hannibal Lecter (Anthony Hopkins) es un asesino meticuloso y perfeccionista que no deja nada al azar… aunque eso no quita que los directores que lo dirigen sí se puedan despistar con alguna que otra cosita. Y es que, en la escena en la que deja un cadáver en el ascensor, cuando vemos el cuerpo desde arriba, podemos apreciar que el reguero de sangre de la espalda le llega hasta el pantalón, mientras que, en otra escena, esa sangre apenas si pasa de los omoplatos.
A vosotros, ¿qué os han parecido todos estos fallos? ¿Os habíais percatado de alguno de ellos?
Si os ha gustado este artículo recordad que más abajo podéis disfrutar de otros que, con casi total seguridad, os resultarán igualmente entretenidos… o eso esperamos, porque la verdad es que los hemos hecho con mucho cariño.
Fuente: Sport.
Por último, esperamos que este erizo te alegre el día: