Un concursante de ‘¡Ahora caigo!’ se lleva 8.000€ al estilo de ‘Slumdog Millionaire’

Todas las tardes de lunes a viernes, Arturo Valls tiene una cita con la audiencia en el plató de ‘¡Ahora caigo!’, uno de los programas más populares de nuestro país. Y, como os podéis imaginar, cinco programas a la semana dan para ver a muchos concursantes que se atreven a someterse a las preguntas del programa para intentar volver a casa con unos billetes de más.

Rubén era el concursante colocado en la trampilla central y se enfrentaba a un joven llamado Pablo. La pregunta iría relacionada con el ámbito del deporte, algo que de primeras no le hizo mucha ilusión a Pablo y ya lo veía todo perdido. «No es lo que mejor se me da«, reconocía el concursante.

Pista tras pista

En esta prueba, los concursantes van recibiendo pistas (en este caso, datos sobre la persona desconocida) y deben intentar adivinar de quién se trata.

Empezaron a anunciarse las pistas y los concursantes iban probando. «Nació en 1985», «Es leonesa», «Es medallista olímpica», «Puede con más de 100kg»… Ninguno de los concursantes conseguía dar con la respuesta hasta que, finalmente, Pablo acertó: se trataba de Lydia Valentín, la campeona de halterofilia.

«¡Toma castaña!«, exclamaba Valls al escuchar la respuesta del joven. Rubén, por su parte, confesaba que no sabía la respuesta. «Me ha desplomado, no tenía ni idea«.

Muy buena memoria

«¿Cómo ha sido esto Pablo?«, le preguntaba el presentador. Pablo reconocía que conocía la respuesta ‘porque la había visto en ‘El Hormiguero’«.

«Esto es como Slumdog Millonaire, la vio en el Hormiguero y de repente se ha acordado«, bromeaba Valls. Como sabréis, ‘Slumdog Millionaire’ es una película india estrenada en 2008 que en que un joven llamado Jamal se presenta a un programa y va adivinando las respuestas recordando detalles de su vida (también toca muchos otros temas; es un must watch).

Suficiente dosis de riesgo

Tras el acierto, el joven se colocó en la trampilla central y tenía que decidir entre si se plantaba o seguía jugando por 16.001€. Pablo no tenía dudas; prefirió no jugársela y quedarse con los 8.000€. «Me voy a pegar un viajazo… cuando se pueda. Quiero ir a China porque empecé a estudiar chino y me encanta su cultura«, explicaba.

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Fuente: antena3

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