Objetos que nos demuestran la gran imaginación de algunos presos

Por eso, unos presidiarios decidieron hacerse una pistola de tatuaje casera… que les acabaron requisando, claro.

Desgraciadamente, estos objetos son bastante peligrosos… y son capaces de hacerlos con cosas que ni te imaginarías.

Estos, en concreto, están hechos con papel higiénico prensado.

Capaces de meterlos hasta en una chancla.

Un presidiario consiguió hacer una lámpara casera para poder leer por la noche.

Unos reclusos consiguieron colar unos micrófonos en los libros de la oficina de los guardias de seguridad. La intención era saber los momentos en los que pensaban revisar las celdas.

Para poder pegarse una cena romántica.

Esta la hicieron para poder desenroscar ventanas y, así, poder escapar.

Esto es una pipa hecha con una pomada.

En estos zapatos se ocultan cuatro teléfonos móviles… puede que sea ilegal, pero hay que reconocer el ingenio y la habilidad.

Utilizar un montón de pilas para sacar bíceps es una buena idea… como podéis observar.

Hacer una pistola con cosas que tienes por la celda tiene que ser muy complicado… y muy peligroso.

Esta placa se hizo para poder calentar la cama con un ladrillo y una resistencia.

Este, como podéis ver, escondía un cuchillo dentro.

A vosotros, ¿qué os han parecido estos inventos? Dejádnoslo en los comentarios. 

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Fuente: Difundir.