Vivimos una época en la que, en algunos aspectos referidos a la imagen corporal, estamos despertando. Hemos vivido muchÃsimo tiempo sumergidos en una espiral de estereotipos y discriminación en base a la imagen que se ha proyectado de un ‘fÃsico perfecto’ o un ‘fÃsico ideal’. Esto ha causado muchÃsimo daño a muchÃsimas generaciones y, si quisiésemos calcular las consecuencias, nos serÃa casi imposible.
Por suerte y gracias a que, como sociedad, nos estamos concienciando, hemos podido empezar a ver un poco la luz al final del túnel. Gran parte de los avances que se han conseguido en este aspecto son gracias a las redes sociales y al hecho de que han permitido que el visibilizar un problema como este sea algo mucho más fácil.
Pero nunca debemos olvidarnos de que, al final, los que hacen todo esto posible son las personas. Y es que de eso es que venimos a hablaros: hoy nos gustarÃa recordar a una joven de 15 años que hizo uno de los gestos más bonitos para promover la ‘positividad corporal’.
Carleigh O’Connell es una joven residente de Wall, un pequeño pueblo costero. Hace unos años, mientras estaba en su casa repasando un examen que tenÃa al dÃa siguiente, le llegó un mensaje al teléfono móvil: alguien le habÃa pintado un graffiti burlándose de su cuerpo en una zona por donde solÃa pasar mucha gente.
Esto no le iba a arruinar el dÃa a Carleigh y decidió hacer lo que muy poca gente se atreverÃa a hacer. Se armó con unas cuantas cosas (y una buena dosis de valor) y se dirigió a la zona donde le habÃan hecho el graffiti.Â
Estaba en una roca a la cual no se podÃa acceder con facilidad, pero a ella no le importaba. Su madre, Daryl, llegó a ofrecerle su ayuda: «Le pregunté si querÃa que fuera con ella», contó a BuzzFeed hace unos dÃas en una entrevista en exclusiva.
«Pero fue sola, y cuando lo encontró hizo que una amiga le hiciera una foto con la roca». La madre explicaba que, al principio, Carleigh posó mirando en otra dirección, como quien no querÃa la cosa. Pero para la segunda foto decidió que tenÃa que darle una vuelta al asunto: «Voy a hacerlo mÃo».
«Lo pensé un poco», dijo, «y me di cuenta de que no me importaba tanto. No les di el poder que querÃan. QuerÃa mostrar a quien fuera que escribió esto que yo era mejor persona«.
Lo importante de todo esto es que ella sabe perfectamente la relevancia del «body shaming» y lo perjudicial que este puede ser para todas las mujeres. Es un tema complicado de afrontar, y por eso ella decidió que esta era la mejor forma de romper el hielo y aportar un granito de arena a la hora de visualizar el problema.
«Creo que la imagen corporal es un problema muy grande entre las chicas. Espero que al menos una persona se sienta mejor consigo misma cuando vea mi historia». Lo cierto es que cosas como estas no se pueden agradecer lo suficiente.
Su mensaje está muy claro: «Sé fuerte».«Ahà fuera hay gente que te apoya. No estás sola», contó en la entrevista. «Sufrir bullying es muy duro, pero no tienes por qué llorar o molestarte por ello. Ahà fuera hay gente que te apoya. Y yo soy una de ellas».
A vosotrxs, ¿qué os ha parecido toda esta historia? ¿Pensáis que es un gesto positivo? Dejádnoslo en los comentarios de Facebook.Â
Si os ha gustado este artÃculo recordad que, más abajo, podéis disfrutar de otros que, con casi total seguridad, os resultarán igualmente entretenidos (o eso esperamos, porque la verdad es que los hemos hecho con muchÃsimo cariño).Â