Las citas de First Dates suelen ser tensas con bastante frecuencia. Habitualmente esto se debe a que una de las dos partes (a veces ambas) no se siente a gusto con la cita que le ha tocado.
Y es que hay veces que la situación se pone algo incómoda en el momento en que se empieza a hablar de sexo. Sobre todo si una de las dos partes es más “echada pa´lante” que la otra o si una de las dos se excede de forma maleducada en algunos comentarios.
Algo así ocurrió en uno de los episodios de First Dates en el que el protagonista masculino no dejó de babear a lo largo de toda la cita.
Guillermo prácticamente dio el sí final nada más ver a Isabel ya que le convenció mucho por su físico. Por desgracia o por suerte, ella no pensó lo mismo.
Pero el chico parecía no enterarse de las señales negativas que le enviaba su cita y no tuvo ningún reparo en hablar de los pechos de Isabel y en lanzarle multitud de piropos sobre el mismo tema (o los mismos temas).
Isabel respondió a ese alud de comentarios siendo sincera y confesó que siempre le había resultado atractiva a los hombres y que solo hacia una semana que se había hecho la operación de cirugía estética para aumentar el tamaño de los pechos. Así que él preguntó:
«¿Y estás contenta? ¿Te lo ves natural?»
Hasta aquí, dentro de lo que cabe, era una conversación normal con alguien que se ha sometido a un cambio físico reciente, pero Guillermo se excedió por completo cuando, en el momento que ella le dijo que aún le dolía un poco, él respondió la siguiente barbaridad.
«Te puedo masajear la espalda y el pecho, para que todo quede perfecto»
Luego, delante de las cámaras, Isabel mostró su indignación por el trato que, en general, últimamente está recibiendo hacia su persona, sobre todo por parte de los hombres.
“Todo el mundo está igual. A ver si os creéis que una se pone los pechos y ya hay que enseñarlos”.
Después han empezado a hablar de sexo y, pese a que de entrada mostraba mucha «valentía», Guillermo ha empezado a sudar de lo lindo y a ponerse un poco nervioso, aunque ha mantenido muy bien la compostura (pese a que, seguramente, sus piernas temblaban como flanes). Y es que Sofía ha soltado algunos comentarios que parecían bolas curvas de béisbol que Guillermo ha sabido coger al vuelo.
Fue entonces cuando, tras hablar sobre si eran activos o pasivos, ella le reveló a su cita que era pasiva y que le gustaba que le diesen por todos los lados.
Cuando escuchó eso, las siguientes palabras de Guillermo se podrían resumir en un: Sí a todo. Pese a no aparentar ser tan “experimentado” como su cita, él se mostró dispuesto a todo e interpretó ese comentario como una invitación en vez de lo que era, una confesión que, posiblemente y aunque no sea nada malo, no haría a una persona con la que le interesase tener algo.
Él estaba dispuesto a darlo todo por ella, pero, por las palabras de Isabel, deducimos que ella no tenía demasiadas esperanzas en cuanto al rendimiento de su cita en la cama.
Finalmente, Isabel rechazó a su pareja por hablar demasiado de su físico y, concretamente, de su busto. Con lo cual, imaginamos que a Guillermo le costó bastante dormir esa noche.
¿Qué opináis de esta pareja? ¿Les veis un futuro juntos? Explicadnos en los comentarios de Facebook si creéis que su relación tiene posibilidades de funcionar.
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