Hay pequeñas cosas que, por más que no seamos demasiado conscientes, forman parte de nuestra vida de forma incuestionable. El papel de burbujas; las bolsitas de plástico herméticas para guardar vegetales; el papel de aluminio; las fundas para móviles; los brackets dentales; mil cosas que, de forma sutil y sibilina, ocupan gran parte de nuestra realidad.
Hoy os queremos hablar de una de estas realidades mÃnimas. Se trata de algo que utilizamos de forma regular y que, si lo pensamos bien, el servicio que nos viene a ofrecer es completamente prescindible. ¿Por qué nos ponemos tan radicales? Pues por un motivo muy simple: porque este objeto es tremendamente perjudicial para nosotrxs y para el mundo.
¿De qué estamos hablando? ¿Del uranio radioactivo? ¿De las chanclas con calcetines? ¿De las excusas para invadir paÃses con grandes reservas naturales de petróleo? No; de algo muchÃsimo peor: las pajitas de plástico.
Aquà os explicaremos varios motivos por los cuales deberÃais dejar de utilizarlas de inmediato:Â
1Te pueden salir arrugas
Meterte una especie de cilindro entre los labios cada vez que quieres disfrutar de una bebida fresquita no es lo mejor para el colágeno de los labios. Arrugar constantemente la boca como si estuviésemos dándole un piquito a un loro no es lo mejor si no queremos acabar con la boca como si fuese un ano arrugado. Beber con pajita, fumar o pasarse el dÃa silbando son cosas tremendamente nocivas para nuestros labios.
2No se reciclan (en muchas partes del mundo)
En los Estados Unidos, por ejemplo, se generan cada dÃa unos 500 millones de pajitas, lo que serÃa el equivalente a 127 autobuses escolares llenos de este perjudicial plástico. ¿Sabéis cuánto plástico es eso? Hay alternativas muchÃsimo mejores, como las pajitas de acero inoxidable o las de bambú. Cualquier cosa es mejor que esto.
3Producen caries
El hecho de dirigir de forma tan concentrada según que lÃquidos hacia una zona concreta de nuestros dientes fomenta el desgaste localizado. En el área en la que impacta puede corroerse el esmalte o acumularse mayores cantidades de azúcar. Si es que todo son desventajas…
4Perjudican a los animales
Si habéis echado un vistazo a YouTube últimamente, habréis visto, con casi total seguridad, algunos vÃdeos en los que puede verse a tortugas con pajitas incrustadas en sus vÃas respiratorias y a voluntarios intentando sacárselas. Este sufrimiento es innecesario y lo estamos causando con nuestra inconsciencia. En medio de todas las toneladas de basura que lanzamos cada dÃa al mar, hay millones de estos demonios de plástico. Pensemos un poco más en nuestro planeta y un poco menos en nosotrxs.
También se ha descubierto que muchas de las ballenas que aparecen muertas en las costas tienen el estómago repleto de plástico. El componente que más predomina, por lo general, son las pajitas, ya que se cree que muchas ballenas no son capaces de filtrarlas con sus dientes y acaban ingiriéndolas.
5Pueden producirnos gases
Cuando bebemos con pajita, puede que metamos más aire del que debamos en nuestra cavidad oral. Esto, como cabrÃa esperar, lo que hará es producirnos muchÃsimos gases y, ya sabéis aquello de que, si no sale por arriba… por algún lado tiene que salir.
La cuestión es que deberÃamos contemplar alternativas a este tipo de ‘instrumento’. No es complicado encontrar una alternativa a algo que cumple una función tan superficial, y si no queremos sustituirlas por opciones que no estén hechas de plástico, simplemente, podemos dejar de utilizarlas… ¿Existe alguien sobre la faz de la Tierra que no sepa beber con normalidad de un vaso? Pues eso.
A vosotrxs, ¿os han convencido estos argumentos? ¿Os lo pensaréis dos veces antes de volver a utilizar uno de estos bastoncillos de Satanás? Dejádnoslo en los comentarios de Facebook.Â
Si os ha gustado este artÃculo, más abajo, encontraréis otros que, con casi total seguridad, os resultarán igualmente interesantes. Avisadxs estáis.Â
Fuentes: Spoon University, Faro de Vigo, Delish.