Phillip Craft es un cirujano plástico de 47 años de Miami que lleva 11 años reconstruyendo el cuerpo de su esposa, y todavía no ha terminado. Si quieres ver cómo luce ahora y lo que ambos han explicado sobre ello, ¡sigue leyendo!
Su mujer Anna al principio rechazó la idea, pero tras dar a luz a su segundo hijo en 2003 cambió de opinión. «Sentía que mi figura no era la misma. Estaba ayudando a Phillip en el trabajo y veía mujeres de 60 años guapísimas saliendo de la clínica. Fue entonces cuando pensé: ‘¿Por qué no?’ Quería sentirme mejor conmigo misma».
A los 32 años, se sometió a una liposucción, realces de glúteos, cirugía de contorneado del cuerpo, se moldeó la cintura y el abdomen y se inyectó Botox.
También se puso rellenos en el rostro para hacerlo más redondeado y en las mejillas.
«Ahora cuando Anna lleva sus bikinis pequeños, todo el mundo se detiene a ver sus curvas. Después del embarazo, la madre naturaleza hizo que las cosas fueran a mal, así que rellene sus nalgas y, lo más importante, le devolví a Anna su encanto», ha dicho Phillip.
«Soy el epítome del trabajo de mi marido, y estoy muy orgullosa de ello», dice Anna, y él está de acuerdo. «Cuando los clientes llegan, digo: ‘Mi mujer es mi modelo interna'».
La pareja se conoció en 1995 en la tienda de regalos del hospital en que Phillip estudiaba Medicina. «Anna se inclinó para coger una tarjeta que se le había caído. Vi sus preciosas piernas y desde ese momento supe que me quedaría enganchado para siempre. Después de mis retoques quirúrgicos a su cuerpo, creo que está todavía más guapa ahora».
«Siempre les digo a mis pacientes: ‘Si queréis saber cuán bueno soy, mirad a mi mujer’. Anna tiene la figura más bonita actualmente, luce absolutamente magnífica. Trabajamos muy bien juntos como equipo marido y esposa».
«Creo que el Botox y los rellenos son necesidades básicas para cualquier mujer mayor de 25 años para mantener su belleza. Parecer natural no siempre significa ser natural», explica Anna.
«Nunca diría no a más cirugías, es como ponerse aparatos o que te arreglen el cabello. Si te hace sentir mejor y realza tu belleza, deberías ir a por ello. Estoy totalmente abierta a la mejora personal ya sea cirugía de orejas, rinoplastia o cualquier otra cosa. Solo se vive una vez».
«La cirugía plástica es algo bonito y me encanta que Phillip trabaje su magia en mí. Estoy muy orgullosa de que me llamen su mujer diseñadora».
Si quieres conocer a una chica que se gastó 94.000 euros en cirugías para parecerse a Barbie por su fallecido novio, ¡no te puedes perder el siguiente post!
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Fuente: usmagazine
