Por muy escéptico que seas, es innegable que nuestra vida está plagada de cosas tremendamente extrañas e inexplicables (al menos hasta ahora). Fuerzas sobrenaturales o no, en ocasiones, sufrimos de episodios de intuición muy potentes o de la revelación de una especie de fuerza espiritual que se escapa a nuestra comprensión. Quizás no debamos ir corriendo a entrenar con un sable láser, pero sà debemos tener en cuenta estos factores ya que, a lo mejor, podrÃamos ser personas con un ‘regalo’ al que podrÃamos sacarle mucho partido.
1Obtienes información valiosa de tus sueños
Cuando dormimos, estamos en un estado que es muy vulnerable, por lo que el sueño es un lugar fácil y susceptible en lo que a recibir mensajes se refiere. Si eres de esas personas que suelen recordar sus sueños, no lo pases por alto. Lo mejor es anotarlo en un diario para ver si puedes sacar algo de provecho. Mientras más receptivo seas con la información que recibes en este estado de letargo, más probable es que te llegué más información en el futuro.
2Tienes visiones (y habitualmente se hacen realidad)
A esto se le llama premonición. Estar hablando con alguien y que te venga un pensamiento repentino, o que una imagen emerja en tu cabeza en un momento aleatorio. Si resulta que estos elementos acaban por convertirse en realidad, lo mejor es que empieces a hacerles caso.
3Sueles ir al lavabo a la 4 de la mañana
Despertarse a esa hora puede ser una señal de que los espÃritus están intentando comunicarse contigo. Es la llamada ‘hora de conexión’ y cuando más presencia ‘espiritual’ hay. Si aceptas esta realidad, puedes tomártela de otra forma y, en lugar de ignorarla, utilizarla para obtener información valiosa.
4Las pesadillas te mantienen dando vueltas
Se cree que los niños son los que están más conscientes del reino de los espÃritus, de ahà a que tengan más ‘amigos imaginarios’. Por ello, es normal que a menudo tengan pesadillas. Cuando dormimos, entramos en un estado de ondas cerebrales similar a como lo hacÃamos cuando éramos jóvenes. Si hay espÃritus tratando de llegar a ti, es posible que primero intenten despertarte suavemente, como mencioné en el último punto, pero si eso no funciona, pueden convertirse en pesadillas.
Si las pesadillas te sacuden, despierta, abre los ojos y dile a quien sea: «Si eres de la luz, estoy despierto y aquà para escuchar lo que te gustarÃa compartir conmigo»… y espera a ver qué pasa.
5Eres tremendamente empático
A veces, las emociones que experimentamos no nos pertenecen a nosotros, sino a alguien más que conocemos. Incluso podemos tomar nota de las sensaciones y dolores fÃsicos de otras personas. Puede que la barriga te duele, de forma inexplicable, durante unos dÃas. Si, tiempo después, algún ser cercano sufre de alguna dolencia relacionada a esta parte del cuerpo y se cura y tu dejas de sentir el mismo dolor… puede que hubiese una relación.
Las experiencias de otros no son necesariamente algo de lo que nosotros, como individuos, debemos preocuparnos, aunque podrÃas usarlas como señales de que debes prestar atención a tus seres queridos. Además, cada vez que te sientas molesto o triste, pregúntate si estas emociones son incluso tuyas.
6Tienes una fuerte intuición
Es fácil detectar este factor cuando, al preguntarle algo a alguien, intuyes la respuesta correcta antes de que la diga. Es como una especie de globo sonda que salta a tu cerebro en forma de pensamiento y, simplemente, aciertas. Esa información es demasiado valiosa como para pasarla por alto.
Si cumples todos estos requisitos… podrás elegir entre el lado luminoso o el lado oscuro… recuerda que en este último hay galletitas.
Y vosotrxs, ¿habéis experimentado alguna de estas cosas? Dejádnoslo en los comentarios de Facebook.Â